DESESPERANZA

Con la conseguida  por Esperanza Aguirre en 'peloteo descarado' serán 18 las medallas olímpicas para España, 4 de ellas de oro.

Pues sí, tras la inesperada dimisión  de la presidenta de la Comunidad de Madrid al nuevo 'gobernanto' designado por ella le ha faltado tiempo para arrojarse de nuevo a sus pies y concederle esta distinción tan "merecida".

Juegos de pelotas a parte esta dimisión me plantea una disquisición que me preocupa; por un lado me alegro de que una señora que estaba temporalmente en la política se largue con viento fresco después de 30 años (hay que ver que diferente es el concepto de temporal para unos y otros). Su abandono ha sido llorado por los amigos y aprobado por los enemigos con declaraciones del tipo: "era una política de raza" o "decía siempre la verdad, al precio que fuera..." una de las grandes mentiras de una señora que ha mentido y se ha burlado de todos nosotros descaradamente. Que dijese las mentiras como si fueran verdad no le quita falsedad. Y que alguien así pueda vivir de la política durante tanto tiempo no dice nada bueno de este país.

El otro lado de la disquisición es realmente terrorífico. ¿Y si vuelve en forma de candidata a presidenta del gobierno? En el Partido Popular todo el mundo sabe que cuando Rajoy se termine de quemar, que lo hará, Gallardón irá a por lo que siempre ha deseado y esta señora, quizás, trate de arrebatárselo.

No me imagino un país gobernado por Esperanza Aguirre en el que, además, la alcaldesa de la capital sea Ana Botella... De esta no salimos.